Día Internacional de las Mujeres por la Paz y el Desarme
(Área Federal de la Mujer).
En 1915, se celebró un congreso internacional de mujeres en la Haya, del que surgió la Liga Internacional por la Paz y la Libertad.
En 1987 mujeres del Estado de Israel que se opusieron a la ocupación de los territorios palestinos, y que adoptaron el nombre Mujeres de Negro, se constituyeron como un amplio movimiento de mujeres feministas y pacifistas.
Las movilizaciones del pacifismo europeo tuvieron también un gran eco en la antigua Yugoslavia, de la que surgió una Red Internacional de Mujeres contra la Guerra.
En el Español en los años 80 a partir de la oposición a la entrada de España en la OTAN, se organizaron una gran cantidad de colectivos feministas antimilitaristas.
A partir de los años 90 se empieza a reconocer expresamente que la violencia contra las mujeres, es una lacra que de forma estructural invade toda la sociedad.
A partir de este momento, el feminismo designa directamente a la violencia contra las mujeres, como elemento inseparable del patriarcado.
Pretendieron que justificásemos la guerra en Afganistán porque uno de sus objetivos iba a ser liberar a las mujeres de las aberraciones sufridas a manos de los talibanes. Hoy siguen silenciadas y vigiladas debajo de los mismos burkas.
A lo largo de la historia, hasta nuestros días, el cuerpo de las mujeres ha sido empleado como arma de guerra para humillar al adversario, violándolas, mutilándolas y permitiendo a los soldados que utilicen a las mujeres como esclavas sexuales.
Los feminicidios de Ciudad Juárez y Guatemala no sólo comprenden los asesinatos cruentos de mujeres jóvenes, trabajadoras y pobres, sino que además abarcan violaciones, expropiación de sus bienes, el secuestro y la privación general de su libertad. Hechos realizados por hombres que de manera organizada o individualmente, imponen la crueldad patriarcal.
En las situaciones de crisis económica, como la que ahora padecemos, la tendencia generalizada es relegar a las mujeres al hogar, para que sean los hombres los que ocupen el mercado laboral.
En los estados de mucha población migrante, las mujeres son el intercambio para la paz. Así se habla de no alternarla consintiendo que niñas y mujeres sean mutiladas con velos, burkas, ablaciones y sometimiento a los varones, que en pro del respeto a sus culturas, relegan a las mujeres al roll de objeto propio.
Desde IU, hemos denunciado incansablemente que la violencia contra las mujeres, es una de las manifestaciones más expresas de que el patriarcado no se resigna a replegarse y que sigue dominando socialmente.
Desde IU hemos denunciado constantemente nuestra oposición a las guerras y a las invasiones de unos países a otros y que los soldados de la ONU, han intercambiado pan por explotación sexual.
El movimiento de mujeres por la paz y el desarme va unido intrínsecamente a la posición frontal contra la violencia machista y a la opresión que el patriarcado ejerce contra las mujeres.
Frente al militarismo y la guerra, contra la violencia hacia las mujeres, las feministas defendemos la globalización de los valores de igualdad, el derecho a la diferencia, a la libertad y a la justicia.
Frente a la violencia machista y patriarcal, defendemos una sociedad de iguales donde la violencia esté fuera de nuestras vidas.
¡Fuera la Guerra de la Historia!
¡Fuera la Violencia de nuestras Vidas!